Un año más, la Fundación Juan Ramón Guillén acoge una nueva edición del programa Planeta Olivo. Recientemente han comenzado las actividades correspondientes al curso 2015/2016 y, según las previsiones y visitas concertadas hasta el momento, serán más de 2.800 escolares de diferentes municipios de la provincia de Sevilla los que participen en esta iniciativa. La cifra es altamente satisfactoria puesto que supone más del doble de participantes respecto al pasado año, cuando asistieron  1.317 menores. Este notable incremento de la participación pone de manifiesto la expansión y consolidación de un programa que dio sus primeros pasos en 2011. Hasta el momento han disfrutado de esta experiencia un total de 4.377 menores de Sevilla. 

Esta iniciativa, que se imparte en español e inglés, se ha convertido en un innovador espacio pedagógico que acoge a escolares de entre 4 y 16 años y a sus profesores para ofrecerles visitas formativas en el entorno rural de Hacienda Guzmán, un enclave con más de 500 años de historia, con la finalidad de acercar la cultura del aceite y su fabricación a todos los públicos. Una vez allí, los usuarios entran en contacto directo con los elementos necesarios para comprender de dónde procede el aceite, cómo se elaboraba antes y ahora, cuántas variedades de olivos y aceites existen, qué es una almazara o en qué consiste una dieta equilibrada, entre otras muchas cosas.

Planeta Olivo es un proyecto puesto en marcha por la Fundación Juan Ramón Guillén y Planeta Museum siguiendo la metodología diseñada por Ciencia Divertida, que se compone de distintos experimentos, dinámicas, juegos y actividades cuidadosamente seleccionados y agrupados por áreas de conocimiento con un denominador común: aprender divirtiéndose. Asimismo, Planeta Olivo cuenta con la colaboración del Instituto de la Grasa-CSIC, que avala los contenidos del programa. 

Hacienda Guzmán: historia viva de la cultura olivarera

Además de ampliar sus conocimientos sobre el aceite y la cultura olivarera, los participantes de Planeta Olivo tienen la oportunidad de visitar la Hacienda Guzmán, sede de la Fundación Juan Ramón Guillén, cuya historia se remonta al siglo XVI. En ese momento, Hernando Colón, hijo del descubridor, exportaba el aceite producido en la hacienda hasta las colonias del Nuevo Mundo, lo que la convirtió en la mayor fábrica de aceite de oliva del mundo. Durante la actividad, los escolares visitan la almazara del siglo XVII, donde pueden recrear el proceso de elaboración del aceite de la época, y la olivoteca, el único museo de olivos vivos del mundo, que aglutina más de 150 variedades de olivos procedentes de los cinco continentes. Los ejemplares de esta olivoteca son sometidos a estudios y análisis desarrollados en el centro de investigación situado en la almazara del siglo XXI.