Un total de 341 personas de Acción Contra el Hambre, APASCIDE (Asociación Española de Familias de Personas con Sordoceguera), Fundación TAS, Save the Children y Cáritas han participado en el programa Visitas Solidarias al Olivo en lo que va de año. Esta cifra supone que en lo que va de año se ha registrado un crecimiento del 22,9% respecto al total de beneficiarios de 2016.

La iniciativa, desarrollada con la colaboración de la Obra Social de ‘La Caixa’, consiste en la realización de una actividad lúdico-educativa en la sede de la Fundación Juan Ramón Guillén, la Hacienda Guzmán. De esta manera, se promueve que los participantes, pertenecientes a colectivos en riesgo de exclusión social o con discapacidad, salgan de su entorno habitual mediante un acercamiento al mundo rural y al sector del aceite de oliva.

341 personas

En concreto, han participado 27 vecinos del barrio sevillano de Torreblanca a través de Acción Contra el Hambre; 52 usuarios de APASCIDE (Asociación Española de Familias de Personas con Sordoceguera) procedentes de Gerena; 53 personas con discapacidad intelectual de los centros de Burguillos y La Algaba de Fundación TAS; y 153 menores en riesgo de exclusión social atendidos por Save the Children residentes en los barrios sevillanos de San Pablo, Tiro de Línea y Los Bermejales; así como 56 usuarios de Cáritas de Sevilla.

Durante la jornada en la Hacienda Guzmán, los participantes visitan el molino del siglo XVII y la almazara actual, percibiendo así la evolución registrada en la fabricación del aceite de oliva a lo largo de tiempo; realizan una cata con diferentes variedades de aceite y comprueban la diversidad que caracteriza al sector olivarero paseando entre las más de 150 variedades que integran la olivoteca de la fundación.

Desde 2013, año en que se celebró la primera edición, 1.196 personas de 16 asociaciones y organizaciones sin ánimo de lucro han participado en las Visitas Solidarias al Olivo.
La Fundación Juan Ramón Guillén nace en 2011 con la finalidad de acercar a la ciudadanía el sector rural en general, y el olivar en particular, incrementando la visibilidad, formación e investigación sobre la materia, así como el desarrollo de actividades dirigidas a mejorar la calidad de vida de aquellos colectivos con más necesidades.