Un total de 272 personas en situación de riesgo de exclusión social han participado desde comienzos de año en las Visitas Solidarias al Olivo, desarrolladas por la Fundación Juan Ramón Guillén con la colaboración de la Obra Social ‘La Caixa’. El
programa consiste en la realización de una actividad lúdico-educativa en la sede de la fundación, la Hacienda Guzmán (La Rinconada, Sevilla), con el objetivo de que los participantes salgan de su entorno habitual mediante un acercamiento al mundo rural y al sector del aceite de oliva.

En concreto, en las 6 sesiones realizadas hasta el momento han participado usuarios de entidades y organizaciones sin ánimo de lucro de las provincias de Cádiz y Sevilla: FEPROAMI (Federación Provincial de Organizaciones de Personas con Discapacidad Intelectual, Parálisis Cerebral y Autismo de Cádiz), INDACE (Asociación de Daño Cerebral Adquirido),  Fundación TAS y Save the Children.

Durante la jornada en la Hacienda Guzmán, los asistentes han visitado el molino del siglo XVII y la almazara donde se elabora actualmente aceite de oliva, percibiendo así la evolución registrada en la fabricación del aceite a lo largo de tiempo; han realizado una cata con diferentes variedades y han podido comprobar la diversidad que caracteriza al sector olivarero paseando entre las más de 150 variedades que integran la olivoteca de la fundación.

Desde 2013, año en que se celebró la primera edición de las Visitas Solidarias, más de 1.800 personas en situación de riesgo de exclusión social han participado en el programa.

La fundación
La Fundación Juan Ramón Guillén nace en 2011 con la finalidad de acercar el sector rural a la ciudadanía, haciendo especial hincapié en todo aquello vinculado al ámbito olivarero, incrementando la visibilidad, formación e investigación sobre la materia, así como el desarrollo de actividades dirigidas a mejorar la calidad de vida de aquellos colectivos con más necesidades. Además, la entidad cuenta con un proyecto emblemático, la candidatura de los Paisajes del Olivar Andaluz a Patrimonio Mundial e la UNESCO.

Asimismo, la fundación dispone de unas privilegiadas instalaciones para el desarrollo de su actividad, la Hacienda Guzmán, una antigua fábrica de aceite del siglo XVI que cuenta con una singular olivoteca, un museo de olivos con más de 150 variedades procedentes de diferentes partes del mundo.